miércoles, 17 de abril de 2013

Me opero.

Esta mañana tenía cita para revisar la condromalacia pero ¡oh sorpresa¡, el especialista está de guardia y me recibe el que me lleva el aquiles.

Para la condromalacia me pincha ácido hialurónico. Cuando dice que me va a pinchar ni me mira, qué cabrón, es frio como el acero. La enfermera le pregunta ¿con anestesia? y le contesta que no. Tranquis que sigo contando.

Evidentemente dejo mi silencio para otro momento y le digo: señora, esas cuestiones las trata conmigo directamente.

El tipo me mira como diciendo: vaya, otro maratoniano "acojonao".

El médico accede a la anestesia y me dice que me relaje y me ponga cómodo, claro, cómodo e inyección en la rodilla es como sexo y matrimonio, es decir, lo puedes intentar pero tardas mucho hasta que lo consigues.

Ya tumbado me señala la zona donde pinchar, parte superior de la rodilla. 

Nada más notar la inyección grito. (creo que empiezo a gritar cuando la vi acercarse, pero eso no puedo asegurarlo así que dejémoslo ahí).

En una escala de bravura y coraje debemos poner a Conan a un extremo y a mí en el otro; el resto de la humanidad en el medio, claro. Pocoyó también está por delante, si digo lo contrario mentiría, tanto como si dijera que estoy a régimen.

Sigo. Me mira de nuevo con cara de "joé con el maratoniano blandurrio" y me suelta con sorna: "mucho maratón y aquí gritas con una aguja que no se ve". Y añade, "es una aguja de insulina, es con la que los niños se pinchan ellos solos".

Vale, me callo y me averguenzo de mi falta de valor, aún así, tan solo pensar en la mera perspectiva de un nuevo pinchazo me dan ganas de volver a gritar, cual actriz en peli de miedo.

Vamos a por el hialurónico. De nuevo ofrezco gratuitamente un nuevo espectáculo de valor y arrojo pero ni lloré ni me fui corriendo, lo aguanté como se aguantan estas cosas, esto es, dejando la hombría en la silla de la sala de espera.

Ya superado este trance viene lo chungo. Me pasa revista a lo suyo, el aquiles.

Para empezar os tengo que decir que si un especialista de un hospital que no tiene delante tu historia y habla de memoria te dice eso de "a tí te he pinchado un par de veces" es que estás chungo. Pues eso es lo que me dijo.

Me mira el aquiles y me dice que el engrosamiento tiene poca solución. ¿Quieres operarte?.

Ante esa pregunta lo primero que pasa por a cabeza de una persona normal es .... no se, se me ha olvidado cómo piensan las personas normales, yo solo pensaba en sumar meses, para que me diesen cita para la intervención, más los meses de recuperación, más los meses de coger la forma, más los meses de correr rápido, eso computaba mínimo hasta Mapoma 2014.

Le pregunto si eso se recupera solo y me dice que si no me opero eso se queda como está, que no me va a doler pero que nada de vida deportiva, no solo correr, sino deporte en general, lo que se dice una condena sedentaria en toda regla.

Antes de pensar mi "vis maratoniana" ya había decidido por mí: no puedo hacer otra cosa que intentar correr, aunque me de pánico una aguja de insulina me lanzo como un bizarro  a un incierto intento quirúrgico de solución (bizarro según la RAE).

Me manda pruebas para valorar cómo está el calcáneo y con eso decidirá si la cosa pasa por raspar el engrosamiento del aquiles o le da un toque al calcáneo. De la operación a empezar a correr mediarán un mínimo de cuatro meses, veremos en cuanto se queda todo en total..

Me siento delante del ordenador y escribo esto. Respiro hondo y nada, no me vale nada y no me tranquiliza nada, la respiración se agita y el anhelo de correr por largos caminos aprieta el alma.

No me vale otra cosa que no sea volver a correr, no soy un hombre paciente pero si tengo una voluntad inquebrantable a la que poner a prueba. Soy corredor de maratones, ya sabéis de lo que hablo.

20 comentarios:

  1. Yo haría lo mismo (menos gritar como una nenaza), no tengo dudas. No hay nada que perder porque ya está perdido, hay que ponerse en manos de quien puede darte una esperanza. Operarse siempre es jodido, pero mira esos deportistas que se operan y vuelven a estar a tope tras unos meses.
    Quizás lo que sí haría es coger todas las pruebas e ir a pedir una segunda opinión médica. Pero si ya lo tienes claro, a por la operación. Eso sí, con anestesia.

    PD: Espero verte en Madrid donde vayamos a quedar la mayoría (recogida de dorsales sábado, comida de la pasta (te invito)?, te vendrá bien echarte unas risas.

    ResponderEliminar
  2. Vaya cronicón...
    Mucho ánimo con esa operación...

    PD ni sé dónde me dejé yo el valor para esas cosas, si lo encuentras cerca del tuyo, me avise please

    ResponderEliminar
  3. Me apena mucho leer esto, pero yo creo que haría exactamente lo mismo. De pequeño pase por quirófano, y la recuperación no fue agradable, pero aquí estoy. Llegados a este punto lo mejor es intentar solucionar el problema de raíz. Ánimo...

    ResponderEliminar
  4. Desde luego esas agujas por la rodilla no son lo mejor, las sufrí una vez y no grite porque no encontré la voz.

    Ánimo que lo importante es poder correr.

    ResponderEliminar
  5. Poco que decir. El anhelo maratoniano es más fuerte que cualquier típica cobardía (tan masculina y varonil, por otra parte) ante agujas y operaciones.

    Eres corredor de maratón: aguantarás y superarás operación y recuperación.

    ResponderEliminar
  6. Con la acojonado que soy yo con estas cosas, te aseguro que me ha costado leer toda la entrada.

    Eres maratoniano, no te rindes, la decisión parece clara (que no sencilla).

    ResponderEliminar
  7. Pa'lante tio!!! ni lo pienses

    hasta el dia de la operación será la media maratón
    una vez operado será la segunda media, es decir ir descontando días hasta el momento de volver aponerte las zapas
    mucha suerte socio

    Pocoyo también delante ? :-)

    ResponderEliminar
  8. Yo haría también lo mismo, no tengo dudas... hay que ser valiente y apostar fuerte, como tú estás haciendo. Si te sirve de consuelo, a mí también me dan pánico las agujas y las batas blancas! :)

    Un abrazo y ánimo!

    ResponderEliminar
  9. Si estás en buenas manos, todo será para bien. Y ten en cuenta que el postoperatorio es casi tan importante como la intervención, así que paciencia. Volverás.

    ResponderEliminar
  10. Si hay que operarse uno se opera, pero jolines ese médico da poca confianza . Aunque supongo que si llevas tiempo con él será porque es bueno y especialista en temas deportivos.
    Asesorate bien, es algo importante. Siguenos informando de como va todo.
    un beso

    ResponderEliminar
  11. Mucho ánimo Ra. Estas cosas son siempre jodidas (y los m´çedicos listillos e idiotas más aún, de verdad que poca psicología tienen algunos). Ánimo por que al final la victoria será tuya y volverás a correr. SEGURO AMIGO.

    Un abrazazo y fuerzas

    ResponderEliminar
  12. Pues adelante, entre quedarse como estás y mejorar la decisión está clara. Mucho ánimo, sabes que gritaremos y patalearemos contigo

    ResponderEliminar
  13. supongo que no es para reirse, pero me he reido un monton, sobretodo con lo de conan!! jeje
    si te tienes que operar, adelante, es por tu bien!!
    animos!!

    ResponderEliminar
  14. Toda maratón empieza por un primer paso, en este caso el primer paso es operarse. A los hospitales la gente lleva bombones, siempre hay algo positivo

    ResponderEliminar
  15. Me ha sobrecogido tu entrada y me pongo en tu lugar y sin duda me operaría. Para quienes la condena de llevar una vida sedentaria supone casi tanto como dejar de respirar, no hay otra salida.
    Ánimo, adelante con la operación si es tu decisión, que desde aquí intentaremos en lo que podamos ayudar a deshacer ese nudo que aprieta el alma.

    ResponderEliminar
  16. A mi me pinchó hialurónico una doctora y la verdad es que ni me enteré...
    Manos de Angel....
    Yo como han comentado,otros,si me permites , contrastaría opiniones ...resultados de la intervención ,posibilidades,ténica de operación...etc ..
    Yo nunca me operé con el primero que consulté..cada uno te cuenta la película según su experiencia ..y a veces hay bastante diferencia...
    Un saludo.
    CR.

    ResponderEliminar
  17. Muchísima suerte, que te operen bien y que pronto estés recuperado. Un abrazo

    ResponderEliminar
  18. Glup, aun me he quedado mas pálido que tu.
    Sin duda has acertado, operate, recuperate.
    Pues no te quedan maratone, ni nada!
    Un fuerte abrazo
    G

    ResponderEliminar
  19. .Está claro que si por sí solo no se recuperaría la decisión es la correcta.
    Ahora mucha fuerza y ánimo

    ResponderEliminar
  20. Me operé de la rodilla hace casi 20 años, el médico era un desgraciado, no sabía lo que tenía, yo sabía que algo estaba mal y que estaba dentro, y cuando abrieron vieron realmente lo que tenía y sí, era necesario operar. Si no lo hubiera hecho, no existiría el Isidro runner. Si hay que operar, adelante. Se supera, y se vuelve con más fuerzas.

    ResponderEliminar